La aclamada serie ‘La maravillosa Señora Maisel’ expone el valor de poseer una lujosa libreta de piel
“¿Puedo invitarla a una copa?”, le ofrece un cliente a la maravillosa Señora Maisel. “Ya he pedido”, contesta ella, pero él insiste: “Póngalo en mi cuenta”, “No gracias, eres muy amable, pero estoy trabajando”, le responde cortante Miriam Maisel, antes de que llegue su amigo Lenny Bruce a rescatarla de la insistencia de ese desconocido ligón. Se trata de una escena del capítulo cinco de la tercera temporada de esta serie galardonada con numerosos Emmy y Globos de Oro y protagonizada por Rachel Brosnahan, en la que Maisel está anotando, una vez más, posibles chistes en su libreta con funda de piel rosa y anillas en oro paladio. En esas hojas reside todo el éxito de sus stand-ups cómicos.
“Cuando pensamos en el vestuario de la serie, teníamos claro que esa funda de libreta era un elemento crucial que define al personaje, por lo que, a diferencia de los bolsos, sombreros y todo el vestuario de Miriam “Midge” Maisel, no se renueva, siempre es la misma. Es su seña de identidad, de alguna forma”, explica para el Magazine Lifestyle de La Vanguardia Donna Zakowska, quien además de haber sido galardonada con un Emmy como Diseñadora de vestuario en la categoría de “Trajes de Época Excepcionales” por esta serie de Amazon Prime Time se ha encargado, entre otras tareas, del vestuario de una de las giras de Mike Jagger.
“No era tarea fácil. Brosnahan, la actriz que encarna a Midge, es la sobrina de la difunta Kate Spade, quien, en 1993, había fundado junto a su marido la empresa Kate Spade New York, que rápidamente logró un rotundo éxito con la venta de bolsos, marroquinería, agendas y libretas elegantes y de calidad”, añade Zakowska.
Según WGSN Insight for your Business y la también agencia de predicción de tendencias Trend Tablet, la mayor concienciación por el medio ambiente, así como las nuevas directrices del lujoT tienden a comprar menos pero de calidad máxima, hacen que las libretas, agendas y calendarios de piel, así como las estilográficas, vayan a crecer en ventas entre un 34% y un 45% a partir de 2021. De hecho, “ya han vivido un incremento en el volumen de demanda de un 23% desde enero”, explica el profesor de márquetin Theodor McConnell, de la London School of Economics.
La legendaria firma alemana Montblanc ha visto, así, como sus libretas de notas grandes con cremallera, como la Sartorial, elaborada en piel Saffiano y con capacidad para tarjetas de visita, notas, papeles y otros artículos de escritura; y también el organizador con cierre, tamaño A4, Meisterstück, de piel de becerro europea negra, interior en Jacquard con anillo paladiado, varios compartimentos y bolsillos y un calendario, han empezado a tener una mayor demanda. El heritage, el idioma de la elegancia moderna, ha levantado el vuelo una vez más, aliándose a la posibilidad de customizar objetos que ofrecen las últimas tecnologías.
La firma belga Brepols es otra emblemática marca que está viendo como sus agendas de oficina ganan adeptos a diario, al igual que le ocurre a la italiana Tuscany Leather. Porque hay quienes prefieren utilizar la agenda de siempre en lugar de los modernos dispositivos de alta tecnología. Los modelos de Brepols Omniplan, una agenda de bolsillo, y Timing, agendas compactas de oficina, vienen cubiertas en suave cuero e incluyen memorando personal, calendario, días festivos mundiales, listín telefónico y un mapamundi. Es más, estas agendas tienen un bolsillo en la parte delantera donde se puede guardar el teléfono, algo muy práctico cuando, por ejemplo, tenemos que asistir a una reunión importante. “No estamos tan reñidos con la tecnología, como se puede ver”, comenta riendo Claire Koepfel, de la familia Brepols. “Además, ofrecemos una gran variedad de colores y opciones de personalización para que esta sofisticada agenda de cuero sea absolutamente original y única”, añade Koepfel.
Por su parte, el modelo Paul, con el inconfundible candado S, brinda una lujosa garantía de que nuestros secretos estarán siempre a salvo.
La editorial Blackie Books ha sido una de las pioneras en las agendas con contenido. Publicadas anualmente desde 2012, cada año añaden nuevos contenidos adaptados a los tiempos que corren. Las efemérides y las curiosidades históricas que incorporan y que se renuevan en cada edición son, indudablemente, un valor añadido de esta agenda. “Daniel López Valle elabora estos contenidos desde que empezamos y hemos trabajado con varios ilustradores magníficos como Jonathan Millán y, actualmente, Julio Fuentes. Precisamente las ilustraciones y los contenidos adicionales que incluye, incluso listas para anotar los libros y discos que vas leyendo, marcan la diferencia con las agendas digitales, más orientadas a la mera organización diaria de tus tareas. Además, la apuesta firme por el papel es una de las señas de identidad desde que nacimos”, remarca Raül Sànchez-Serrano, staff de esta editorial independiente.
El cuaderno es mucho más reciente que el papel. En 1920 el australiano J.A. Birchall unió varios folios con un trozo de cartón. Así nacía la primera libreta en blanco, que podía servir para escribir o dibujar. Cuando la producción del papel empezó a ser masiva, el precio de estos cuadernos bajó y pasó a ser indispensable en las escuelas de todo el mundo.
En los años cuarenta se popularizaron los cuadernos con anillas y los blocs de notas que dieron pie a las agendas de contactos, ideales para quienes trabajaban en oficinas y despachos.
A partir de ese momento las libretas personalizadas irrumpieron con fuerza y el sector del lujo encontró un nuevo nicho de mercado: agendas que se entregan como detalle en Navidad a los clientes más importantes, o como recuerdo de bodas, comuniones y bautizos, personalizándolas desde las iniciales o el logo de la empresa, hasta incorporar mensajes motivacionales o incrustar fotos de momentos familiares especiales.
Actualmente las fundas de lujo para agendas pasan de generación en generación, al igual que las estilográficas y los maletines de piel, como había ocurrido antaño con los baúles de piel. De hecho, Louis Vuitton ya fabricaba en piel vegana en sus inicios, como puede comprobarse en la exclusiva tienda de antigüedades de lujo Rêveries, en la calle Bonavista de Barcelona, a cargo de la belga Hedji Faradji.
“Si hace apenas dos décadas ir con maletín de piel era algo que se veía anticuado incluso en capitales del diseño como Londres, Milán o París, hoy son muchos los adolescentes que prácticamente se los roban a sus padres o abuelos para venir a clase”, revela Linda Knight, profesora de Diseño de producto en la Universidad londinense Central Saint Martins. “Sé que hay mochilas de plástico en materiales de origen vegano o fabricadas con materiales reciclados, pero llevar algo que perteneció a mi abuelo me parece mucho más elegante”, apunta Markus Hollins, un alumno de Knight de tan solo 19 años. Para quienes quieran iniciar su proprio legado, los maletines de la firma Lundi son una buena opción por su versatilidad y calidad.
La pluma estilográfica, por su parte, no hubiera sido posible sin el plumín de acero, que se fabricaba en Francia hacia 1748 y que fue perfeccionado por el británico Samuel Harrison casi medio siglo después. A finales del siglo XVIII, la zarina Catalina II la Grande utilizaba ya un portaplumas para escribir sus memorias.
Hoy en día, aunque los bolígrafos siguen dominando el mercado, las plumas estilográficas son símbolo de estatus o carácter. Poseer alguno de los modelos de Montblanc, que también permite la personalización de sus productos, es tener un tesoro para toda la vida que se transmitirá a tus descendientes.
Al igual que nos sucede con la Señora Maisel, definir a todo estos accesorios como maravillosos, es poco.
by Anna Tomàs
